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“Cuando uno vale más que varios”

Siempre nos encontramos en la tesitura  (más en los tiempos que estamos sufriendo) de dotar y habilitar nuestro espacio privado, nuestro hogar, de una atmósfera cálida, que nos envuelva y por supuesto, en la que sentirnos cómodos y protegidos, pero a la vez, libres.

Complicado, ¿verdad?, bueno, voy a intentar ayudarte un poco. En este pequeño artículo te voy a dar unas pautas a seguir para conseguir sacar provecho de todo el espacio y obtener mayor comodidad, y si quieres seguir profundizando en el tema, acércate  a iNstudio, te atenderemos y escucharemos tus necesidades, para encontrar la mejor solución a tu hogar.

Partamos de la base que la mayoría de hogares son pequeños y están mal distribuidos. En los grandes espacios tendremos otros problemas de los cuales nos ocuparemos en el próximo artículo. Los espacios pequeños tienden a reducirse más si cabe, por diversas causas:

En primer lugar, las paredes innecesarias que cierran y nos encierran, pero sobretodo impiden llegar la luz natural a todos los lugares. Para solucionar este primer problema, elimina los tabiques, y si por necesidad buscas sentirte más protegido (los cambios bruscos pueden crearte un problema de adaptación al nuevo espacio) una buena librería a dos caras o un aparador bajo pueden ser de gran utilidad, con ello lograrás una amplitud visual y ganarás en volumen y claridad. Después solo te queda decorar con tus piezas favoritas.

El exceso de mobiliario.  ¡ Misión imposible pasar entre ellos ! cubren todos los huecos libres y por supuesto llenan todas las paredes.  Piensa seriamente si realmente necesitas todos esos muebles, o agrupando la capacidad en un par de ellos sería suficiente. El mobiliario multifuncional es en muchas ocasiones, una buena solución. Recuerda, el trastero siempre es una buena opción para esas cosas que no utilizas, tenlo en cuenta. Vive para ti, no para l@s demás. Siéntete cómod@ , recuerda que es tu refugio del día a día.

Y por último, la iluminación. Luces que en lugar de dotar de calidez y armonía crean espacios lúgubres y depresivos. Crea escenas diferentes para cada parte del día, elige bien una luz cálida para ambientes relajantes y una luz más fría para espacios de trabajo. Pero no olvides las fases del día y la noche. Combina la iluminación técnica o arquitectónica, con la iluminación decorativa o escenográfica. No abuses de ninguna de ellas, recuerda que en la combinación está el éxito.

Estas son algunas pautas, pero hay más, como los colores a elegir, etc … a que esperas para ponerlo en práctica. 

Si quieres saber más, o buscas una solución personalizada y única … iNstudio iNteriorismo.